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Ejercicio en La Mañana
Pros
Mejor Sueño y Recuperación
Distintos estudios han demostrado que aquellos que comienzan su entrenamiento a las 07:00 pueden dormir más rápido por la noche y producen más hormonas de crecimiento, que las personas que entrenan después de las 17:00. Esto significa que existe la posibilidad de una mejor recuperación.
Más posibilidades de ser Constante
Si has tenido un día largo, es posible que sientas la tentación de volver a casa y relajarte frente a la televisión o puedas tener un evento social. Por lo tanto, adaptar tu entrenamiento al horas de la tarde puede ser difícil e inconsistente.
Varios estudios sugieren que hacer del ejercicio un hábito constante es más fácil cuando el entrenamiento se planifica antes de hacer el resto de tus labores diarias. Habrás tachado la tarea de tu lista a primera hora y estarás lista para comenzar con el resto de tus actividades, sin pensar que todavía tienes que ir al gimnasio.
Tomarás Mejores Decisiones el Resto del Día
Cuando comienzas tu día haciendo algo saludable, en tu subconsciente puede que quieras continuar la forma saludable en que comenzaste tu día. Eso significa que es más probable que elijas mejores alimentos. Además, debido a que ya comenzaste tu mañana con un impulso de endorfinas, te sentirás menos estresada a medida que avance tu día.
Contras
Bajo rendimiento
Si eres una persona más nocturna o tienes problemas para conciliar el sueño temprano, hacer ejercicio a primera hora en la mañana, puede que no sea la mejor idea. Los entrenamientos matutinos pueden requerir que tengas que poner una alarma, lo que puede significar que no estés durmiendo lo suficiente. Y no dormir lo suficiente en lo que respecta al fitness es una receta para el desastre. De hecho dormir mal, altera la intensidad y la energía que le pongas a tus entrenamientos.
Riesgos a Lesiones
La mayor parte de la recuperación muscular ocurre durante el sueño, por lo que si no duermes lo suficiente, tu cuerpo no podrá recuperarse adecuadamente. Si tu cuerpo no tienes tiempo suficiente para recuperarte, podrías terminar lesionándote en el próximo entrenamiento debido al agotamiento. Además, durante las horas de la mañana, los músculos y las articulaciones tienden a estar rígidos debido a la inactividad. Hacer ejercicio mientras aún estás cansada o rígida te ponen en mayor riesgo al no prestar atención a tu cuerpo o tu entorno.
Incapacidad de Ganar Músculo
Dado que los músculos usan glucosa para alimentarse mientras haces ejercicios de fuerza y resistencia, un entrenamiento matutino no produce ganancias significativas en masa muscular o fuerza. Esto se debe a que en la mañana el cuerpo no tiene suficientes reservas de glucosa. Aunque es posible que hayas comido antes del entrenamiento, puede que tu cuerpo necesite algunas horas para reabastecer las reservas que hayas usado durante la noche.
Ejercicio en la Tarde/Noche
Pros
No tendrás que apurarte
Además de poder dormir unas horas más, no será necesario que tengas el estrés de tener que preparar una merienda antes de entrenar, la maleta del gym, un almuerzo y un cambio de ropa. También podrás incluir rituales agradables a tu vida, como disfrutar de un desayuno completo o meditar. Eso sin mencionar que podrás tomarte tu tiempo en la ducha, en lugar de darte un regaderazo rápido en las duchas públicas de tu gimnasio!
Estarás lista para cualquier desafío
¿Sabías que la mayoría de los récords olímpicos se rompen por la tarde? ... ¡No es broma!
Esto también podría ser el resultado de que la temperatura de nuestro cuerpo esté en su punto más alto durante el día. Por la mañana, tus músculos y articulaciones aún no están listos para un entrenamiento intenso, ya que aún necesitan estirarse y calentarse. Sin embargo, cuando llega la noche, al menos has estirado tus extremidades caminando todo el día. Además, tus reservas de glucógeno están llenas y listas para darte el combustible necesario para levantar más pesado y saltar más alto!
Vas a poder Quitarte el Estrés y La Ansiedad
¿Tuviste un mal día en la oficina? ¿Tuviste una pelea con tu pareja? Entrenalo. Aunque antes haya mencionado que levantarse temprano para hacer ejercicio podría mejorar tu estado de ánimo el resto del día, no podemos controlarlo todo. Después de un día largo y duro, un entrenamiento puede tener un gran efecto tras desahogar toda tu energía en él y desestresarte. Los entrenamientos intensos pueden requerir mucho poder mental y puedes canalizar toda la ansiedad acumulada durante tu día para seguir adelante.
Contras
Buscarás Más Excusas
Si estás cansada y tuviste un día largo, a veces lo último que vas a querer hacer es pasar más trabajo. Va a ser demasiado fácil encontrar excusas para cancelar tu entrenamiento e irte a casa a ver Netflix.
Puede que Afecte tu Sueño
Para algunos, entrenar por la noche podría ser justo lo que necesitaban para dormir bien. Sin embargo, para otros, el ejercicio aumenta su metabolismo, adrenalina y hormonas del estrés. Lo que significa que haber hecho ejercicio a pocas horas previas de irte a dormir, hagan que no logres conciliar un sueño de buena calidad.
Menos máquinas y opciones
Había mencionado antes que hacer ejercicio en la noche te permite tomar una ducha larga y agradable en casa sin que tengas que apurarte y tener que compartir espacio con otras personas. ¿Pero sabes por qué tendrás que intercambiarlo? Máquinas ocupadas, clases llenas y menos opciones. Correr o andar en bicicleta por la noche puede ser peligroso debido a la falta de luz y acosadores. La mayoría de los gimnasios están más llenos por la noche y es más probable que tengas que compartir equipos con otros o esperar tu turno. Sin mencionar que tu clase de Zumba favorita (¡conmigo!) Ya podría estar llena.
Veredicto: Haz lo que te funcione A TI
No hay respuesta correcta o incorrecta. Algunos prefieren hacer ejercicio por la mañana y siempre que puedan mantenerse constantes, los beneficios podrían incluso superar a todos los inconvenientes enumerados. Lo mismo ocurre con los deportistas de la tarde. El mejor momento es el que te ayude a mantenerte motivada y ser consistente con tu entrenamiento. Si no disfrutas levantarte temprano, o casi te estás arrastrando al gimnasio tan pronto como termine tu día, no será una práctica sostenible.
Recuerda que al igual que las dietas, no existe una "talla única" para entrenar. Escucha a tu cuerpo y trabaja para alcanzar tus objetivos en consecuencia.
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